ALgo te da miedo
tus ojos tiernos, de honesta mirada
te delatan. Los muy atrevidos saben calmarme
aunqe no sin cierto recelo
Una punzada que por momento se agudiza
te detiene en la noche que se quiebra
y la ciudad, abierta para ti, te crispa
te confunde, te excita, te marea
Con implorable gesto me pides que me vaya
y aunqe no te creo y mi júbilo te irrita,
cazo al vuelo la duda en tus palabras
y me alejo cabalgando, dilatando la sonrisa
Bajo los focos tramo planes difusos
donde deseo y asco se contornean
verdad y mentira son invitados de piedra
y lo que digan no tendrá valor alguno
En mis regresos a casa contigo, solo de mil formas,
busco redención en el eco del portal
a modo de suplica me río bajo la luz naciente
y a penas a 10 segundos del final...
El ascensor cruje, como si le pesara mi estado
y aunqe casi consigue perdonar mi penosa sombra
sin piedad finalmente me arrastra y me arrastra
hasta la llama fría de mi hogar
Ahora entiendo que mi vida te detiene
y que ya no soy locuaz en este tercio de la noche
pero creme si te digo que a estas horas
ni siquiera tu entereza, nada se sostiene
No hay comentarios:
Publicar un comentario