sábado, 26 de noviembre de 2011

a fin de cuentas

Apenas somos unos cuantos días, y  vamos
abriéndonos paso  Tiempo a tiempo, llama a llama,
Hacia otros días que de memoria repasamos
Como si conociéramos el reloj y sus horas
Y lo situásemos en las coordenadas exactas  de un mapa

Vamos dejando una estela
De eslabones que nos sujetan a la nada,
Pero supongo que a fin de cuentas
La nada es nuestras, y solo ella entiende
De nuestro miedos  y presidios.

A veces buscamos, varias veces ,
Alguien que nos lleve de la mano,
Y en los abismos de los otros,
Que suelen ser ecuaciones imposibles
Intentamos  hacer de la nada
Algo más tangible e indeleble.

Sin embargo lloramos y reímos,
 y deseamos que escriban sobre nosotros en diarios
intentamos descifrar el código de gestos y de formas
que sistemáticamente repetimos.

Es peligroso vivir sin darse cuenta
Pero más peligroso es preguntarse por qué lo hacemos

sábado, 19 de noviembre de 2011

engáñame

Te estaba esperando mientras hacía
Un uso virulento de mis bajas pasiones
Mientras la memoria se volvía rencorosa y malhablada
Y el corazón se nutría de sarcasmos e ironía.
Te estaba buscando sin buscarte
Entre las medianeras y las páginas web
Sin levantar la voz, sin preguntar tu nombre
Envuelto en la piedra de esta ciudad fría,
Porque son en esas horas de cristal y ceniza
En las que te encuentro, después de que la luz
Alumbrase mis escombros
Y enumerase mis defectos uno a uno

Consigues engañarme, me dices que el pasado
No ha crecido en estatura,
Que los sueños no han envejecido,
Y que todavía podemos inquietar a la muerte
Si perfilamos nuestros cuerpos de determinada manera
Y  cerramos los ojos ante lo incierto.

martes, 8 de noviembre de 2011

Nobles Quimeras

di mis llaves al guardián de la luz
encontré cobijo en la soledad de las palabras
fue desde entonces que
no salgo a manifestarme por las guerras, ni por los parados
ni por las multas de tráfico, ni tan siquiera por tu ultima omisiva
a mis divinos caprichos.
No importaban las grandes contiendas, ni el dolor ageno,
ni tu rostro suplicándome "no te vayas" , "no me mientas".
por que ya me he ido, a fin de cuentas, mucho antes
de que tu rogases, a un terreno cercado de dificil acceso.
Entregué mi alma a un dios ilícito
con el que escribo en moteles sátiros versos
desde entonces pliego noches en labios sedientos
y esparzo cenizas de amor y reproches.
Si lo ves dile pronto que traiga las claves
para el mensaje cifrado de tu ojos ambrientos.
por que creo que puedo generar un desastre
si me empeño en seguir con mis nobles quimeras.
necesito tu piel y mi lágrima viva,
necesito una herida de trazo certero, 
para volver a protestar por las multas de tráfico,
 y no ser un canalla si te doblego esta noche.