y recuerda que eres pasión, y eres lluvia
y eres
sueño, y noche contra noche, y algunas noches
eres cuerpo que se extiende sobre el cuerpo,
y
eres pregunta sin respuesta, y eres voz hecha añico contra el suelo
eres también eso, la luz oscuro de la boca
de metro,
las ciudades en las que nunca has estado.
El paso por venir,
el puñal sobre la piel del forastero, el
miedo, la locura,
el
crimen que nunca has cometido.
Por eso no temas el desfile de inútiles
promesas,
Ni el dedo acusatorio de los que hablan con
frases aprendidas.
Tienen legañas en los ojos y pánico en
los labios
No han atravesado la ciudad en llamas
Todavía no saben que son el polvo y la
ceniza de una foto.
No han llegado al laberinto en el que te
pierdes, y buscas,
Y el tiempo no es sólo el tiempo, y la
vida muerde como un cachorro
Recién nacido.